摘要:Al estudiar el grado de estabilidad de los agroecosistemas de la región, los cultivos de leguminosas, por su decisivo aporte de nitrógeno y proteina a los demás componentes sistémicos, se convierten en los principales indicadores de la sostenibilidad ecológica. 50 años atrás se viene registrando desglaciación en los nevados de la región, por calentamiento del planeta y desapa.rición progresiva de los arreglos de leguminosas en los últimos 20 años, por relaciones causales no suficientemente establecidas. La actividad biológica en el ecosistema también se altera por los cambios de la temperatura con influencia en los componentes del suelo donde los microorganismos juegan papeles decisivos y donde la acción antropogénica indudablemente también influye corno lo señalan evidencias empíricas y consultas recogidas en la formulación de la siguiente hipótesis: El uso intensivo de los suelos ha excedido su potencial, cuya productividad se ha querido recuperar con aplicaciones desproporcionadas de agroquí.rnicos yefectos descompensatorios en la micoflora, con aumento de la virulencia del Fusarium oxispurum por pérdida de ca.pacidad sa.profitica competitiva de otros microorganismos antagonistas. Así, la patogenicidad se hace indicadora del desequilibrio medio-ambiental. Adquiere relevancia el enfoque ecológico en el abordaje del problema, cuyo tratamiento no sólo se condiciona por fenómenos naturales sino que la acción antropogénica lo puede atenuar o agravar según propicie interacciones contrarias entre los componentes más activos de los agroecosistemas. De allí la importancia del control biológico que propenda por la diversidad microbiana y la restitución del m~dio para las. leguminosas.