摘要:Celebrar 50 años es usualmente en la vida de una persona un reconocimiento de adultez. La persona ha vivido más de la mitad de su vida. Su organismo usualmente empieza a decaer, aunque sus funciones psicológicas y su productividad social estén en plena producción. Celebrar 50 años de una disciplina o una profesión en una Universidad y en un país es reconocer que el "bebé" es viable. No es signo de madurez. Es más bien, en los términos temporales del desarrollo del conocimiento humano y de las prácticas sociales, el haber dado sus primeros pasos vacilantes y con frecuencia llenos de caídas, de equivocaciones, de vacios, pero también tener la vitalidad necesaria para mirar con optimismo el futuro.