摘要:El presente escrito señala que, en el ámbito teórico y de investigación aplicada, todas las corrientes contemporáneas de la psicología se han enfocado a desarrollar un cuerpo de conocimientos y una tecnología educativa que permiten optimizar la enseñanza, es decir, la psicología cuenta con un extenso cuerpo de conocimientos y una serie de propuestas que ayudarían a mejorar sustancialmente la educación en México. Desgraciadamente, dichas contribuciones no han sido aprovechadas por diversas razones, entre las que se encuentran las políticas educativas oficiales, las limitaciones profesionales que se han impuesto al psicólogo educativo, y la falta de investigaciones dirigidas al desarrollo de propuestas que nutran los aspectos ya señalados, ubicadas en el contexto educativo mexicano. El planteamiento central es que el psicólogo mexicano tiene, potencialmente, la posibilidad de enriquecer al sistema educativo nacional siempre y cuando enfoque sus esfuerzos, por un lado, a investigar de manera sistemática los aciertos y problemas del sistema mismo, en sus diferentes aspectos, dejando de lado las descalificaciones entre escuelas teóricas. Por otro lado, se requiere que haya una ampliación en las funciones profesionales a él asignadas y una nueva orientación del trabajo psicológico hacia un sistema preventivo y hacia la programación de la práctica didáctica y el currículum general, es decir, a la colectividad educativa de este país.