摘要:La pedagogía elaborada por Séneca tiene por objetivo la formación vital del ser humano. En el presente artículo se analizan principalmente sus cartas -pero también sus diálogos y tragedias- para determinar cuáles son los principios rectores del pensamiento pedagógico del estoico romano. Se trata de sintetizar cuáles son los principios morales exigibles a toda persona que pretenda asumir sus responsabilidades ciudadanas. Esta asunción no es opción, sino obligación vital para todo ser humano que pretenda alcanzar la madurez humana de vivir moralmente. La moral es la condición de la felicidad y, al tiempo, el rasgo distintivo del sabio. Estos tres conceptos son los que vertebran la pedagogía de Séneca: moral, felicidad y sabiduría. Con ellos el autor hispanorromano elabora una pedagogía práctica sostenida por una concepción de la vida como conocimiento y elección. El conocer y el elegir son las dos caras de un mismo proceso que conduce a la virtud, verdadero fin de la vida humana. En resumen, el presente artículo analiza cómo Séneca desarrolla este pensamiento para construir una pedagogía para la vida cotidiana o, lo que es lo mismo, una pedagogía del vivir.
其他摘要:The pedagogy developed by Seneca aims at educating the human being for life. This article mainly discusses his letters, but also its dialogues and tragedies, in order to identify the guiding principles of the Roman stoic’s pedagogical thinking. It attempts to synthesize the moral principles which are required from the part of any person who intends to take up his civic responsibilities. This assumption is not an option, but a vital requirement for every human being who seeks to achieve human maturity to live morally. Morality is the condition of happiness and, at the same time, the hallmark of wisdom. These three concepts are the backbone of Seneca’s teaching: moral, happiness and wisdom. With them, the Roman author develops a practical pedagogy supported by the conception of life as knowledge and choice. Knowing and choosing are the two sides of the same process which leads to virtue, the true end of human life. In short, this article discusses how Seneca develops this line of thought in order to build a pedagogy for the daily life, that is, a pedagogy for living life.