摘要:El objetivo de esta exégesis es iniciarse en la pregunta por esos ocultos caminos de bosque donde el sátiro nietzcheniano (Sileno) del Nacimiento de la tragedia. A partir del espíritu de la Música (1872), persigue, en la frontera del lenguaje humano, ese pretender volverse a la vez música e idea o "música de la idea" (como aludiera Stéphane Mallarmé 3 ). Alución que se vuelve inquietante en Ortega y Gasset cuando escribe en sus Meditaciones del Quijote (1914): "Es ahora el pensamiento un dialéctico fauno que persigue, como a una ninfa fugaz, la esencia del bosque (…) Tengo ahora delante de mí estos dos sonidos: pero no están ellos solos". 4 El fragmento anterior, incluido en "Arroyos y oropéndolas" (no 3, "Meditación preliminar"), es quizás una invitación desde la égloga de Stéphane Mallarmé 5 "L'Après- midi d'un faune" (1876), pasando por el Prélude à l'après-midi d'un faune (1894) de Claude Debussy 6 , desde las cuales tal vez Ortega proyectó su pregunta "por Debussy" y "la claridad", en relación con La deshumanización del arte (1925), donde sentenció: "Debussy deshumanizó la música, y por ello data de él la nueva era del arte sonoro" 7 . Sentencia que coincide con Manuel de Falla y su inquietud por la música del compositor francés, especialmente en relación a la "idea de Espa.a