摘要:El escrito pretende llamar la atención sobre la importancia del aspecto moral en la educación virtual. Se reflexiona sobre la identidad digital de aquel que se educa en un entorno virtual de aprendizaje o que simplemente vive bajo las actuales coordenadas que han delimitado a la tecnología educativa. En este contexto, la identidad digital es definida como la expresión hiperexistencial del hombre ciborg manifestada en su avatar que actúa en el ciberespacio. Así las cosas, la construcción del escrito se elabora a partir de la necesaria relación de la ética con la educación y la tecnología, comprendiendo al ser humano como sujeto que se educa y que se afecta por lo tecnológico. Lo urgente no es la limitada preocupación por el plagio. Se argumenta sobre lo perentorio, es decir, adentrarnos en los campos fecundos y todavía inexplorados de la ética vivenciada en los entornos virtuales de aprendizaje. La tecnología, más allá de fomentar herramientas pasivas en las manos de los usuarios, adquiere matices de agente moral que influye sobre aquellos que la utilizan, que aplicada a la educación exige renovación de los planteamientos pedagógicos para la actualidad. Todo ello hace pensar en la necesidad de cuestionar o de replantear los paradigmas pedagógicos que orientan la educación a distancia y que deberán tener de manera axial a los valores como su fundamento. Finalmente, la relación de la triada educación, tecnología y ética, encuentran en ésta última
其他摘要:he paper aims to draw attention to the importance of the moral aspect in virtual education. It reflects on the digital identity of the one who is educated in a virtual learning environment or who simply lives under the current coordinates that have defined educational technology. In this context, the digital identity is defined as the hiperexistencial expression of the cyborg man manifested in his avatar, which acts in cyberspace. Thus, the construction of writing is based on the necessary relationship of ethics with education and technology, understanding the human being as a subject that is educated and affected by technology. The urgent thing is not the limited concern about plagiarism. It is argued about the peremptory, that is, to delve into the fertile and still unexplored fields of ethics experienced in virtual learning environments. Technology, beyond promoting passive tools in the hands of users, acquires nuances of moral agent that influences those who use it, which applied to education requires renewal of pedagogical approaches to the present. All this suggests the need to question or rethink the pedagogical paradigms that guide distance education and that should have values in an axial manner as its foundation. Finally, the relation of the triad of education, technology and ethics, finds in this last one a little researched field and of necessary study for a highly qualified virtual education.