摘要:RESUMEN: Entre los años 1926 y 1930, J. Serra Vilaro excavó en Tarragona lo que consideró en aquél momento como el foro de la ciudad, así como algunas estructuras arquitectónicas correspondientes a otros edificios, todas ellas situadas en una zona en la cual se habían efectuado diversos hallazgos a lo largo del siglo pasado. Recientes estudios (Mar-Ruiz de Arbulo, 1986 y 1987) han demostrado que el espacio porticado que en un principio se consideró como foro, corresponde en realidad a una basílica adyacente al mismo. Junto a la misma existía un espacio descubierto en el que se hallaron in situ varios pedestales de estatuas con dedicatorias imperiales. Todo este complejo arquitectónico estuvo activo hasta el Bajo Imperio; nos interesa especialmente analizar con detenimiento las causas del abandono de estas construcciones.