摘要:Es usual que los historiadores que abordan el período altomedieval se duelan de los inconvenientes y la falta de disponibilidad de las fuentes escritas. Los problemas de sus noticias son habituales; la escasez de éstas, lamentable; ambos aspectos prácticamente inevitables. Las contrariedades obligan, por lo general, a la búsqueda de alternativas. En la presente situación la opción se concreta como una doble exploración documental: por un lado con las fuentes y por el otro desde el interior de las mismas.