摘要:Desde su época de estudiante en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Chile, fue dejando manifestaciones de su anhelo por crear una arquitectura propia y hacia 1946, ya había establecido en variadas obras, lo que él pensaba que aquella debía ser. En sus estudios y estadías en Europa supo comprender los postulados del movimiento moderno, sin dejarse encandilar sin embargo por diversas expresiones, a las que en ocasiones criticó duramente. Cuando se acercaba ya a los sesenta años su larga labor investigativa y docente le impulsó a proponer un decálogo de recomendaciones a las nuevas generaciones de arquitectos animándolos a continuar en la búsqueda de una arquitectura nacional.