摘要:Antes que la crisis sanitaria de la covid-19 entrara de lleno en nuestras vidas y lo alterase todo –también las prioridades en materia de cooperación internacional– el año 2020 estaba fijado en los calendarios como un momento idóneo para dar un nuevo impulso a las relaciones euro-mediterráneas. El motivo principal es que en noviembre del 2020 se cumple el 25 aniversario de la primera conferencia euro-mediterránea, que reunió en Barcelona a los ministros de Asuntos Exteriores europeos con sus vecinos del sur del Mediterráneo, entre los cuales se incluían israelíes y palestinos. Y a pesar de sus muchas diferencias, fueron capaces de sentar las bases de un nuevo marco de cooperación y diálogo, que ha llegado hasta el día de hoy, acompañado desde 2004 por la Política Europea de Vecindad, y a partir del 2008, vertebrando su dimensión multilateral en la Unión por el Mediterráneo (UpM).