摘要:Muy pocos de los llamados futurólogos se aventuraron a predecir que el 2020 sería un año muy particular para toda la humanidad, al declarar la Organización Mundial de la Salud (OMS) que un virus desconocido venía ocasionando estragos en la población de la ciudad de Wuhan-China, reconociéndose muy pronto estar frente a una pandemia mundial, lo que trastocó todos los ámbitos en que nos desenvolvemos los seres humanos: político, económico y, en particular el educativo, de nuestro interés por nuestra condición académica. En este ámbito, de la “noche a la mañana” nos encontramos que la manera como siempre habíamos realizado el encuentro educativo presencial, en la Universidad de Los Andes y en el Centro de Investigaciones y Desarrollo Empresarial (CIDE) en particular, ya no sería posible. Las primeras semanas fueron de desconcierto y de pánico frente a una situación tan inesperada. No obstante, en la posibilidad cierta que la situación se extendiera, como efectivamente ocurrió, entre los Directivos del CIDE surgió la preocupación de qué hacer con los programas de postgrado en curso y de los de extensión planificados para 2020.