摘要:Desde los primeros años del siglo XXI los principales centros internacionales de difusión artística competían por contar con las más amplias salas de exposición diseñadas por los arquitectónicos más audaces. Los artistas debieron concebir sus proyectos adaptándolos a formatos cada vez mayores, esta ampliación les exigió reflexionar sobre qué relaciones de escala se podían establecer entre los espectadores y las obras dentro de las salas. La expansión global de estos centros de arte contemporáneo ha sido un fenómeno imparable, en el que el diseño arquitectónico de los edificios, y de todos los elementos que componen la experiencia del museo, ha tenido un papel fundamental. Se requiere una reflexión sobre el tipo de experiencia que ofrecen las obras en estos espectaculares espacios en los que corren el peligro de convertirse en un elemento más del diseño, y se están buscando otros espacios especializados en obras de gran escala.