Desde que las expresiones motrices han sido comprendidas como medio para la formación del ser humano, las corrientes de pensamiento referidas a la Educación Física han adoptado otras categorías de análisis disciplinar en su proceso de reconfiguración teórico-práctico. En el concepto actual de Educación Física, la conducta motriz pasa a constituirse en un elemento complejo que es portador de significado para el individuo, y desde esta visión, toda expresión motriz es una forma de manifestación de la personalidad. Cuando el ser humano se mueve, su acción está dotada de sentido, voluntad, pensamiento, de intencionalidad comunicativa y transformadora del ser que se mueve y por tanto de su motricidad. La motricidad como proceso, al ser sentir, comunicar, y querer, superando los enfoques analíticos y mecánicos del cuerpo. Es necesario descubrir nuevas formas para potenciar el desarrollo humano, y en esta búsqueda, surgen oportunidades para repensar la Educación Física, emergiendo como alternativa educativa la pedagogía de la motricidad.