Alemania tuvo un problema que no supo resolver. Europa tiene un problema de salud pública, coordinación y comunicación que no está sabiendo resolver. En Alemania tuvieron un problema por las personas que fallecieron debido a la infección letal de la bacteria Escherichia coli. En Alemania hubo un problema con más de 2.500 afectados o con síntomas. Y la verdad es que las autoridades alemanas y europeas tuvieron un problema en el sistema de alerta sanitaria. Todo fueron errores.
Primero apuntaron al pepino español como causante del brote infeccioso, focalizado en Hamburgo, lo cual ocasionó un problema importante a los agricultores andaluces y a la economía española en general. Más tarde investigaron varios restaurantes de la localidad de Lübeck. Luego las sospechas apuntaban hacia una explotación de brotes de soja de Baja Sajonia y así sucesivamente, demostrando una deficiente vigilancia epidemiológica y una mala comunicación de la situación de crisis tanto mediáticamente como en los grupos de población específicos.