摘要:Desde la ciudadanía se asiste en los últimos años, no sin pesadumbre, a las cada vez más frecuentes disputas, ora pueriles, ora bizantinas, de nuestros dirigentes políticos, al margen de los casos más extremos de corrupción que periódicamente se ponen de relieve y que habrían de motivar la más rigurosa aplicación del marco jurídico-penal vigente. En tiempos de pronunciada escasez económica y bajo crecimiento como los reinantes, se percibe sobremanera la necesidad de afrontar los problemas reales de una sociedad moderna y plural como la nuestra con propuestas de solución eficaces, eficientes e imaginativas. Los medios materiales son inferiores a los de antaño, por lo que la optimización de los resultados apetecidos es ineludible. El vivir por encima de las posibilidades, el despilfarro y la opulencia, en lo público y en lo privado, parecen haber sido superados. Como señala Gómez Yánez asistimos en la actualidad a un rudo debate político inservible para las dimensiones del reto que se alza ante nuestro país, en el que los partidos políticos no pueden captar el impulso de la sociedad y traducirlo a discursos e iniciativas políticas.