摘要:Para efectos de este trabajo, el terrorismo se entiende como un método de acción política violenta, que tiende a articularse en procesos de larga duración (campañas terroristas), con el fin de compensar asimetrías en el contexto de un conflicto. Como método, el terrorismo opera provocando una destrucción o caos suntuario, según un modelo eminentemente transitivo y cuyo efecto psicológico es superior a sus efectos materiales (por cuanto elige objetivos con alto valor simbólico), a efectos de transmitir un mensaje y afectar grandes audiencias, en aras de la promoción (principal aunque no exclusivamente) de determinadas pretensiones políticas (Molano-Rojas, 2010). Una de las características más llamativas del método terrorista es su tendencia a presentarse en oleadas de cobertura global. Un investigador pionero (Rapoport, 2004: 47) definió estas oleadas como “un ciclo de actividad en un periodo determinado –un ciclo caracterizado por fases de expansión y contracción… (cuyo) rasgo fundamental es su carácter internacional; actividades similares que ocurren en varios países, orientadas por una fuerza común predominante que determina las características y relaciones mutuas entre los grupos participantes”. Siguiendo esta hipótesis, se ha sugerido en otra parte (Molano-Rojas, 2009b) la existencia de tres ciclos globales de terrorismo, es decir, momenta (más que periodos) durante los cuales se intensificó y extendió el uso del terrorismo como método predilecto para la acción política por diversos grupos en todo el mundo: un “ciclo revolucionario” (que va desde 1870 hasta 1914, aproximadamente), uno “emancipatorio” (que se produciría entre 1948 y 1980), y uno más reciente, el “milenarista”, que data de la década de 1990 y actualmente estaría en plena expansión.