摘要：El pasado 20 de octubre coincidieron en Montenegro dos convocatorias electorales anticipadas, las parlamentarias para esta república federada y las municipales para la capital, Podgorica, y la localidad costera de Tivat. Estos comicios se han considerado como una prueba del apoyo y solidez de la posición del Presidente Djukanovic tras la crisis política e institucional derivada de la firma del acuerdo de Belgrado de 14 de marzo. Este Acuerdo de Principios acordó la transformación de la República Federal de Yugoslavia (RFY) en un nuevo Estado Común de Serbia y Montenegro, con el objetivo de evitar, o al menos retrasar, el proceso inminente de independencia de la pequeña república federada como estaba previsto por el propio Djukanovic y sus socios de gobierno. Los resultados de las consultas no han dejado de sorprender por significar un castigo a las tendencias más extremas tanto la independentista (Alianza Liberal) como las federativas (Coalición Juntos por el Cambio). Sale reforzado el Partido Democrático de los Socialistas (PDS) del Presidente Djukanovic que, por razones de pragmatismo y supervivencia política, inició un acercamiento a la comunidad internacional, moderando sus posiciones. El resultado es también un voto de confianza para Djukanovic y lo que es aún más notable, un voto refrendado por un elevado porcentaje de participación (77,2 %) y la aceptación de los resultados por los perdedores sin las habituales acusaciones de fraude, tan propias de los Balcanes. La primera consecuencia práctica ha sido la dimisión de Djukanovic como Presidente para poder ser elegido Primer Ministro, lo que se explica por la necesidad de garantizarse una cómoda inmunidad frente a presentes y futuras acusaciones de presunta vinculación con el crimen organizado y también una garantía de poder para los próximos cuatro años, una manera de evitar riesgos innecesarios en las Presidenciales previstas para el 22 de diciembre de 2002
