La emergencia de Brasil como actor internacional importante no cabe más duda. En un nuevo orden mundial basado sobre multilateralismo efectivo, la colaboración entre estados y otros entes democráticos de “ideas afinaes” es una condición necesaria aunque no suficiente. Este artículo presenta un análisis critico del impacto de la política exterior de Brasil bajo las presidencias de Lula y Rousseff sobre la retórica de la” potencia civil europea”. El artículo ilustra esto con ejemplos concretos. El interés más general es que presenta también una ilustración de lo complicado que es crear un nuevo orden internacional multilateralista.