La tradición exportadora de la provincia de Alicante en el sector hortofrutícola se remonta al siglo XIX, sin embargo será a partir de la segunda mitad de la presente centuria cuando comenzará a tejerse una verdadera red empresarial especializada en la comercialización de variedades hortícolas. En este sentido, las actividades comerciales, especialmente externas, pasaron a representar uno de los principales ejes sobre el cual tanto empresas asociativas como privadas se apoyarían para integrarse en el mercado hortofrutícola mundial. Se trata de empresas que por regla general tienen una alta capacidad de gestión y elevada operatividad, atributos indispensables para poder competir frente a las grandes transnacionales fruteras en el Mercado Único Europeo.