摘要:La liberalización de la economía de mercado, apoyada por las políticas de las ad-ministraciones europeas, y la expansión física, económica y social de la urbanización tienen como efecto la desaparición de la explotación agraria característica de la vertiente atlántica del País Vasco: el caserío. La competitividad y la productividad a bajo coste que exige la modernización agraria choca con su reducida base territorial, la escasez de mano de obra y la insufi ciencia de inversiones. Un factor determinante de esta deserción lo constituye el entorno social. La inadecuada base territorial de las explotaciones supone otro défi cit estructural insalvable. Este hambre de suelo da lugar a una fuerte competencia por su apropiación en la que los intereses agrarios son los más débiles. Por otro lado, la desaparición de la institución del heredero único conduce a la división irreversible de las haciendas. La permanencia de la explotación depende en defi nitiva del tipo de familia. En esta decisión el elemento clave gira en torno a la existencia o no de un sucesor