Las diversas teorías del desarrollo ponen de manifiesto sus deficiencias una vez que se las confronta con los procesos de diferenciación en los países en desarrollo. Basándose en una comparación entre los casos de Argentina y Corea del Sur, resulta evidente cómo los cambios de estructura en la economía mundial predeterminan y modifican las condiciones para los procesos de desarrollo en el Tercer Mundo. Las circunstancias sociales internas constituyen también instancias de relevancia, así como el fracaso de los intentos de industrialización orientados unilateralmente a los mercados internos.