Como en el resto de América Latina, la coyuntura que vive Honduras se encuentra marcada por los procesos de ajuste económico, democratización política e intentos de modernización del Estado. Todo ello dentro del actual contexto mundial de reestructuración y globalización de la economía, bajo la implacable hegemonía del mercado y las nuevas tendencias del comercio y las finanzas internacionales. En el caso hondureño dichos procesos se encuentran encabezados por el tercer Presidente constitucional de la República en el lapso de una década (1981-1991), después de una Asamblea Nacional Constituyente realizada en 1980 y tres elecciones sucesivas para escoger autoridades supremas.