Son tres los factores que básicamente inciden en la redefinición de la función militar en el área latinoamericana: los cambios en el escenario estratégico global; los procesos de consolidación democrática y la nueva relación entre civiles y militares; y los cambios en la política de EE.UU. hacia la región. Las fuerzas armadas expanden sus funciones a nuevos campos y surge un «neonacionalismo» que torna difícil la desmilitarización. Un debate nacional y regional sobre seguridad y el rol de las fuerzas armadas debería contribuir a una mejor articulación política e institucional del sector.