摘要:En enero de 2008 entró en vigor la Ley para el desarrollo sostenible del medio rural. Con el objetivo de fomentar la actividad económica en estas áreas, propone que el sistema nacional de incentivos regionales dé un trato preferente a las zonas rurales consideradas prioritarias. En junio de 2010 se aprueba el Programa de Desarrollo Rural Sostenible para el periodo 2010-2014 y con él, los incentivos regionales adquieren el papel protagonista como instrumento al servicio del desarrollo rural. Este artículo tiene por finalidad contrastar si los incentivos regionales concedidos entre 2008 y 2010 muestran algún tipo de discriminación positiva a favor de las zonas rurales, en general, y de las menos desarrolladas en particular. Es decir, si han comenzado a adaptarse al nuevo escenario en el que deberán representar su papel de manera efectiva desde 2010.
其他摘要:In January 2008, the Law for sustainable development in rural environment came into force. Aimed at promoting economic activity in rural areas, the Law proposes that the National System of Regional Incentives should give preferential treatment to rural areas considered to be priority. In June 2010, the 2010-2014 Sustainable Rural Development Programme was approved, through which regional incentives take on a leading role as an instrument to serve rural development. The objective of this paper is to ascertain whether the regional incentives granted between 2008 and 2010 evidence any positive discrimination in favour of rural zones in general, and particularly least developed areas, in other words whether they have begun to adapt to the new scene in which they will have to play their role effectively as of 2010.