摘要:Algunos parásitos humanos se originaron en ancestrales prehomínidos de Africa. Especies de nemátodos tales como Enterobius vermicularis y Trichuris trichiura son compartidos por los humanos y otros primates filogenéticamente emparentados (Pan and Gorilla), lo cual indica que tales parásitos antiguamente infectaron a un ancestro común de estos grupos. Cuando los humanos migraron desde Africa a otros continentes, llevaron consigo parásitos a lugares donde las condiciones climáticas permitieran su transmisión de huésped a huésped. Sin embargo, otros parásitos fueron adquiridos a través de la historia evolutiva humana biológica y social, durante la ocupación de nuevos territorios. Las evidencias paleoparasitológicas, encontradas a través del análisis de material arqueológico, son una fuente valiosa para recuperar información de infecciones parasitarias emergentes y desaparecidas. Los parásitos pueden ser usados como marcadores biológicos de migraciones humanas prehistóricas. Además de esto, son indicadores de dieta, debido a que los ciclos de vida parasitarios están relacionados con ciertos alimentos que fueron consumidos por grupos humanos en los diferentes hábitats ocupados. El objetivo de esta revisión bibliográfica es reunir los hallazgos paleoparasitológicos en Sudamérica y comparar la relación huésped humano y parásitos intestinales con condiciones de vida y relaciones ambientales a través del tiempo.
其他摘要:Some human parasites originated in prehominid ancestors in Africa. Nematode species, such as Enterobius vermicularis (pinworm), hookworms and Trichuris trichiura are shared by humans and other close phylogenetic primates (Pan and Gorilla), showing that they infected a common ancestor to this group. When humans migrated from Africa to other continents they carried these parasites wherever climate conditions allowed parasite transmission from host to host. Other parasites, however, were acquired throughout human biological and social evolutive history when new territories were occupied. Paleoparasitology data is a valuable source to recover emergence and disappearance of parasite infections through analysis of archaeological remains. Parasites can be used as biological markers of prehistoric human migrations. They are also indicators of diet, as parasite life cycles are related to specific kinds of food consumed by human groups in the different habitats they occupied. We review paleoparasitological findings in South America, comparing human-host and intestinal parasites with life conditions and environmental relationships through time.