摘要:Este estudio transversal tuvo como objetivo conocer las prácticas y cambios alimentarios en la población del Distrito Federal (DF) así como sus determinantes. Se utilizó una muestra aleatoria de 500 participantes con más de 15 años para la realización de entrevistas domiciliarias en el plano piloto (área central), 6 ciudades satélites y en una invasión irregular (Vila Estructural). En los domicilios, fue sorteada una persona con más de 15 años. Entre los entrevistados, predominó el sexo femenino (64,4 %). La edad promedio fue de 35 años (mediana = 31); los que estudiaron la primaria completa representan un 39 % y los de nivel universitario el 24,8 %. El 39 % ganan hasta 4 salarios mínimos. Predominó el consumo diario de arroz, fríjol, pan, frutas, legumbres y verduras. El consumo diario de carne bovina fue de 11,6 %. El 37 % relatan cambios alimentarios, y entre ellos, el 32,6 % lo atribuyeron a la pérdida de peso, el 25,4 % a la preocupación con la salud y el 20 % a la reeducación alimentaria. El salario y la escolaridad estuvieron asociados a cambios alimentarios.
其他摘要:This cross-sectional study was aimed at assessing food-intake patterns in the population of the Brasilia, federal district, as well as their determinants. A random sample of 500 participants aged over 15 years was used to make household-based interviews in such places as Plano Piloto (central Brasilia), six peripheral cities and a temporary slum (Vila Estructural). An over 15 years-old person was randomly selected in each household. Among the interviewed persons, females were predominant (64.4%); average age was 35 years (median=31); those who finished elementary school accounted for 39% and those who had university degree represented 24.8% of the total. 39% earned up to 4 minimal salaries. Daily food preferences were rice, beans, bread, fruits and vegetables. Bovine meat was eaten daily by 11,6%. 37% of individuals stated recent food intake changes; the main reason for this in 32.6% of them was loss of weight, in 25,4% was concern about their health status and in 20% was food-intake re-education. Salary and schooling were associated to food-intake changes.