摘要:El abuso sexual puede provocar problemas cognitivos y conductuales que requieren intervención psicoterapéutica. Este estudio tuvo como objetivo evaluar el proceso terapéutico de dos casos clínicos. Los participantes fueron dos niñas víctimas de abuso sexual que participaron de un grupo de terapia cognitivo comportamental. Los casos fueron seleccionados a partir de las respuestas diferenciadas a la terapia grupal. Una de las niñas presentó reducción de los síntomas de estrés, depresión, ansiedad y del cuadro de estrés post-traumático, mientras que la otra niña no presentó reducción de estos síntomas. Los resultados mostraron que algunos factores influencian el proceso terapéutico y que algunas variables estuvieron relacionadas con las respuestas diferenciadas a la terapia de grupo: la edad de inicio del abuso sexual, la forma del abuso, la percepción de la experiencia en la atención, la penalización del agresor, y la persistencia del sentimiento de culpa en la técnica de inoculación del estrés. Los estudios de casos pueden contribuir a la comprensión de las respuestas individuales ante modelos de intervención efectivos basados en la evidencia.
其他摘要:Sexual abuse can trigger cognitive and behavioral problems which require psychotherapeutic intervention. This study aimed to evaluate the therapeutic process of two clinical cases. Participants were two sexually abused girls who participated in cognitive behavioral group therapy. The cases were selected based on the different responses to group therapy. One of them showed a reduction in the symptoms of depression, anxiety, post-traumatic stress disorder, and stress while in other these same symptoms were not reduced. Results showed that factors influencing the therapeutic process and that were related to the different responses to group therapy included the onset age of sexual abuse; the form of abuse; the perception of the experience in the care institution; criminalization of the offender; and persistence of guilt when faced with stress inoculation techniques. Case studies can contribute to the understanding of individual responses to effective intervention models based on evidence.