Sobre todo desde los trabajos de Daniel Kahneman y Amos Tversky, la psicología económica se consolida como disciplina. Esos autores muestran que la racionalidad económica con frecuencia no se cumple a cabalidad. Resultado de esas constataciones se plantea si dado que el sujeto puede perjudicarse con sus decisiones le corresponde al Estado decidir por él. Esta cuestión acarrea la discusión de si el paternalismo de Estado, aún el blando, no menoscaba la libertad y por ende el desarrollo mismo de un sujeto responsable ¹ . En este trabajo ubicamos algunos ejemplos y los términos de la discusión. En las conclusiones planteamos que es la propia dinámica del mercado, al pasar de una etapa a otra, más que una iniciativa individual, la que corrige esas irracionalidades. Por último analizamos en que condiciones la intervención del Estado no socava la libertad del individuo o incluso puede fortalecer las posibilidades de un sujeto responsable.
Behavioral economics has now become a major new field in economic. Daniel Kahneman and Amos Tversky backed up by a large amount of experiments; show that rationality in standard economy is not always accomplished by the decision maker. Due to these experiments the discussion is the following: if the individual can harm himself by making his own decision, then should the State make the decision on what is best for the individual? This subject matter leads to the controversy on paternalism: Does it diminish freedom as a value and so the development of the responsible citizen? In this paper we will set some examples of the discussion currently held in the academic world. Last we will show how the historic market dynamic can modify the irrational behavior. We will also set some precision on when not only the state intervention doesn't diminish freedom but also can enforce the experience of consumption of the responsible citizen.