Se reportaron 50 hábitat utilizados por Aedes aegypti en el ambiente urbano de Ciudad de La Habana, correspondiendo 66 % a depósitos artificiales, de los cuales 57,5 % fue clasificado como no útil por la población; los recipientes de uso doméstico constituyeron 14 %, mientras que los criaderos naturales aportaron 8 %. Como un resultado interesante 12 % de los hábitat está representado por fosas, alcantarillas y drenajes que contienen las llamadas aguas negras; factor que debe considerarse en la epidemiología del dengue en Cuba y merece un estudio de los factores ecológicos asociados a la especie que pudieran estar influyendo en este comportamiento; además se estimula a alcanzar niveles adecuados de participación comunitaria como una herramienta en el control de este peligroso vector.